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En mitad del desplome del peso y de los temores de que el país no podrá pagar su deuda

Argentina sube los tipos de interés al 60%

Mauricio Macri, presidente de Argentina

En mitad del desplome del peso y de los temores de que el país no podrá hacer frente a los pagos de su deuda y, después de que, en esta misma semana, el Gobierno de Mauricio Macri se viese obligado a solicitar al FMI un adelanto de 3.000 millones de dólares.

El Banco Central de Argentina ha aumentado los tipos de interés en quince puntos porcentuales, con lo que se sitúan ya en un 60%. Una maniobra desesperada para intentar ralentizar el desplome de su moneda.

Todo ello, en mitad de los temores de que su país no podrá hacer frente a los pagos de su deuda y, después de que, en esta misma semana, el Gobierno de Mauricio Macri se viese obligado a solicitar al FMI un adelanto de 3.000 millones de dólares del multimillonario préstamo de 50.000 millones que aún suscribieron durante el mes de junio y con el que se suponía que quedaban encauzados gran parte de los problemas de la economía argentina.

El Banco Central ha señalado que esta decisión ha sido tomada por unanimidad por su comité de política monetaria para aminorar los temores de que se dispare la inflación y lidiar con la caída del peso frente al dólar, que tan sólo en el día de hoy, desde la apertura de los mercados, acumulaba un 15,6%. 

Se ha alcanzado así un nuevo mínimo histórico, en un ejercicio en el que, a lo largo de estos casi ocho meses, la moneda argentina ha perdido la mitad de su valor: a principios de 2018, un dólar valía 18,8 pesos; ahora ronda entre 36 y 39 pesos.

Asimismo, según el comunicado oficial del Banco Central argentino, se ha decidido elevar los «encajes» bancarios; es decir, la cantidad de dinero físico que cada entidad financiera debe conservar. Otra medida que busca evitar que haya tanto dinero en circulación y el riesgo de «un mayor impacto sobre la inflación doméstica».

Pese a todo, el jefe de Gabinete de Macri, Marcos Peña, ha asegurado hoy mismo que «no estamos ante un fracaso económico» ya que, según apuntó en una rueda de prensa, considera que su Gobierno está «encaminado a lograr el equilibrio fiscal, que es el eje central para reducir nuestras vulnerabilidades».

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