El Partido Revolucionario Institucional (PRI) del presidente Enrique Peña Nieto, ha resultado perdedor en las elecciones celebradas el pasado domingo en México, aunque se mantiene como la principal fuerza política del país. El Partido Revolucionario Institucional (PRI) del presidente Enrique Peña Nieto, ha resultado perdedor en las elecciones celebradas el pasado domingo en México, aunque se mantiene como la principal fuerza política del país.
Esa afirmación tiene en cuenta resultados todavía preliminares, en los que la alianza Partido de Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD) podrían sumar al 48% de los electores, tomando en cuenta los estados donde ya gobernaban.
De confirmarse las tendencias, el PRI quedaría como la primera fuerza en gobiernos estatales, con 15 gobernaciones, seguido del PAN (ocho); y del PRD, con cuatro.
La alianza PRD-PAN gobernará en tres entidades más.
El partido de gobierno, se quedaría con los gobiernos de Campeche, Coahuila, Colima, Guerrero, Hidalgo, Jalisco, Estado de México, Nayarit, Oaxaca, San Luis Potosí, Sinaloa, Sonora, Tlaxcala, Yucatán y Zacatecas, aunque no son datos definitivos.
La lista nominal de los 15 estados que pueden quedar en manos del PRI suma poco más de 36 millones de ciudadanos.
Si los cómputos por distritos confirman los resultados, Acción Nacional, se perfila para administrar las entidades de Aguascalientes, Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Guanajuato, Puebla, Querétaro y Tamaulipas.
En estos estados la lista nominal suma más de 18,7 millones de personas.
Los datos preliminares indican que el PRI pierde seis gobernaciones que ostentaba, aunque recupera otras dos.
Para 2017 podría resultar decisiva la votación por la gobernación y otros cargos en el estado de MéxicoPeña Nieto.
