La Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) de México ha exigido a la empresa estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) que siga con el pago a las 450 empresas a las que aún debe unos 40.000 millones de pesos (unos 2.185 millones de dólares). La Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) de México ha exigido a la empresa estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) que siga con el pago a las 450 empresas a las que aún debe unos 40.000 millones de pesos (unos 2.185 millones de dólares).
Manuel Herrera Vega, líder del organismo, ha asegurado que el compromiso de la petrolera es liquidar la totalidad de sus deudas. De la que de momento ha pagado unos 92.000 millones de pesos (o 5.027 millones de dólares), según recoge El Universal.
Hace unos meses, el recién nombrado presidente de Pemex, José Antonio González Anaya, pidió la apertura de una línea de crédito para hacer frente al pago a pequeños y medianos proveedores. Los que ahora le piden cuentas son precisamente los que no entran en esta categoría y que aún no han recibido pago alguno.
En un primer momento, los proveedores no quisieron hacer demasiado ruido y le dieron un voto de confianza a González Anaya. En esos momentos consideraron que la apertura de la línea de crédito enviaba una señal de estabilidad y confianza en el sector. Sin embargo, más de dos meses después, estos gestos son insuficientes y las empresas desean cobrar lo que se les debe.
Pemex no se encuentra en su mejor momento. La crisis del precio del petróleo, así como el robo de gasolina se han cebado con la empresa, que además no ha presentado sus mejores resultados. En el informe del primer trimestre ha reportado pérdidas por casi 3.600 millones de dólares, un 38% menos que en el mismo período del año precedente. Así las cosas, no es de extrañar que los acreedores hayan decidido plantarse.
