El presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez, ha decretado “esencialidad” para los servicios educativos, de manera que las huelgas de profesores quedan prohibidas y el paro que comenzó ayer tendrá que suspenderse a partir del miércoles que es cuando entra en vigor la normativa. El presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez, ha decretado “esencialidad” para los servicios educativos, de manera que las huelgas de profesores quedan prohibidas y el paro que comenzó ayer tendrá que suspenderse a partir del miércoles que es cuando entra en vigor la normativa.
Vázquez ha decretado que los profesionales docentes tendrán que acudir a clase de modo obligatorio o se estará incumpliendo la ley. Se trata de una medida que no se adoptaba desde antes de que entrase en vigor la democracia hace 30 años.
La noticia la ha dado la ministra de Educación y Cultura, María Julia Muño tras reunirse el Consejo de Ministros uruguayos. Ha manifestado que es una medida muy “difícil” pero que han tenido que tomarla.
En concreto, los profesores pedían un salario mínimo de unos 1.040 dólares mensuales y rechazaron la propuesta de 865 por parte del Gobierno. También solicitaban que el presupuesto educativo fuera del 6% del Producto Interior Bruto (PIB) y han rechazado una y otra vez que los aumentos estén sujetos a su promesa de no hacer huelga.
Al parecerles injusta la medida, en cualquier caso, los profesores han decidido denunciarla ante la Justicia. Julio Moreira, dirigente de la Asociación de Docentes de Secundaria en Montevideo ha asegurado a El Observador de Uruguay como recoge Economía y Negocios, que “hay una limitación de la huelga. Y no hay ningún factor que ponga en riesgo la vida de los estudiantes como para decretar la esencialidad”.
Los docentes uruguayos tienen también intención de llevar este problema ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
