La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, se ha reunido con los partidos políticos afines al suyo para permanecer unidos en las dificultadas a las que se enfrenta el Gobierno brasileño. Rousseff ha decidido llevar a cabo la reunión estos días de cara a la manifestación nacional convocada próximamente La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, se ha reunido con los partidos políticos afines al suyo para permanecer unidos en las dificultadas a las que se enfrenta el Gobierno brasileño. Rousseff ha decidido llevar a cabo la reunión estos días de cara a la manifestación nacional convocada próximamente por la oposición.
Rousseff ha anunciado que se reunirá también con los agentes sociales, que piden mejores en diversos sectores, como en la educación. El principal objetivo del Gobierno, por su parte, es mantener la unidad y el clima de confianza, aunque no el único.
El ministro jefe de la Casa Civil, Alfonzo Mercadante, ha señalado “la necesidad de decisiones responsables desde el punto de vista fiscal y un diálogo democrático porque tienen unos proyectos muy importantes para el clima económico”.
Por su parte el ministro de Economía, Joaquim Levy ha considerado que cuentan con el superávit necesario para que “la deuda pública caiga y en la medida en que lo haga lo harán también los impuestos públicos a largo plazo”.
