Los demócratas se enfrentan hoy con dudas a las elecciones legislativas, aunque no solo por perder la mayoría en el Senado de EEUU, sino también por ser castigados por el voto o la abstención de los hispanos, desencantados por la falta de la reforma migratoria prometida por el presidente Obama. Los demócratas se enfrentan hoy con dudas a las elecciones legislativas, aunque no solo por perder la mayoría en el Senado de EEUU, sino también por ser castigados por el voto o la abstención de los hispanos, desencantados por la falta de la reforma migratoria prometida por el presidente Barack Obama.
Con los sondeos en contra, como ha informado Efe y recoge el portal de noticias 14ymedio.com los ocho millones de latinoamericanos que viven en EEUU se sienten defraudados por Obama y no tienen intención de volver a respaldarlo como hicieron en 2008 y 2012. Por eso, el Partido Demócrata debe luchar por mantener la ventaja de 55-45 en la Cámara Alta y este exiguo apoyo.
A pesar de ello, según una encuesta del centro hispano Pew, estos votantes tienen aún menos confianza en los republicanos, que siempre se han mostrado duros en el Congreso con el tema migratorio.
En cualquier caso, los republicanos siguen siendo optimistas en los sondeos y podrían conquistar al menos seis asientos más en el Senado, lo que supondría arrancarles la mayoría a los demócratas.
EEUU renueva hoy una tercera parte de los 100 senadores de la nación, dos por cada estado, tendrá especialmente los ojos puestos en Kansas, Luisiana, Iowa, New Hampshire, Alaska, Carolina del Norte, Colorado y Georgia.
