El presidente de EEUU, Barack Obama, ha pedido a la comunidad hispana instalada en el país que preside que tenga paciencia y que no se dará por vencido hasta conseguir la reforma migratoria. Los hispanos le han pedido cumpla de una vez su promesa. El presidente de EEUU, Barack Obama, ha pedido a la comunidad hispana instalada en el país que preside que tenga paciencia y que no se dará por vencido hasta conseguir la reforma migratoria. Los hispanos le han pedido cumpla de una vez su promesa.
Después de asegurar que entiende la frustración que siente la comunidad latina, ha asegurado que no va a darse por vencido en esta batalla hasta conseguirlo. Así lo ha asegurado en la gala de clausura de la reunión anual del Instituto del Caucus Hispano en el Congreso (CHCI).
Tras haber anunciado que retrasaría hasta después de las elecciones legislativas del 4 de noviembre las medidas ejecutivas en materia migratoria ha prometido que la retomará para finales de verano, lo que ha causado una “gran decepción entre las organizaciones a favor de la reforma”.
“Hace seis años, os pedí que me creyerais y esta noche, os pido que sigáis creyendo” han sido las palabras que ha empleado el mandatario estadounidense. Aunque parece ser que no le han creído pues, durante su discurso, Obama ha sido interrumpido por la activista Blanca Hernández, que es de origen mexicano y que trabaja con indocumentados.
Según ella, como recoge Radio Panamá, está harta de seguir oyendo tantas promesas sin que pase nada. Para Obama, la cuestión tiene que ver con la temporalidad, no con si ocurrirá o no, pues la reforma “es buena para todos”.
A pesar de la aparente buena voluntad de Obama, todo apunta a que su retraso ha respondido a presiones dentro de su partido, que consideraban que estas acciones podían perjudicar a algunos candidatos en las elecciones del próximo noviembre.
Los republicanos, que ya tienen la mayoría en la Cámara de Representantes, se han mostrado confiados en que podrán conseguir los seis escaños que necesitan para recuperar la mayoría la Cámara alta.
El presidente, por su parte, los ha acusado de haber “explotado la situación para obtener beneficios políticos” y ha vuelto a pedir el apoyo y la confianza de los hispanos.
