El partido de izquierda Frente Amplio, la tercera fuerza política de Costa Rica, ha pedido al presidente del Gobierno, Luis Guillermo Solís, que pida la adhesión del país a la alianza energética Petrocaribe. El partido de izquierda Frente Amplio, la tercera fuerza política de Costa Rica, ha pedido al presidente del Gobierno, Luis Guillermo Solís, que pida la adhesión del país a la alianza energética Petrocaribe.
La posibilidad ha creado en el país un debate ideológico, económico y ambiental que ha nacido en el país y que supone una pugna por los que están a favor y en contra de entrar al grupo dirigido por el Gobierno del venezolano Nicolás Maduro.
Jorge Arguedas, un ex dirigente sindical del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), entidad productora del 74% de la energía eléctrica ha sido quien ha sacado esta idea a relucir, iniciativa que ha pillado por sorpresa a Solís, que no contaba con ello entre sus planes. De hecho, ya había descartado por completo la adhesión a la Iniciativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba).
Arguedas, en cualquier caso, ha resaltado que en el bloque petrolero “ofrecen condiciones preferenciales y es la única forma posible de lograr rebajar el precio de los combustibles y de la energía eléctrica en lo inmediato”, lo que viene a ser una crítica a Solís, que sus 80 días de Gobierno no ha cumplido su promesa de abaratar la luz.
Solís sabe que en Costa Rica no hay excesiva simpatía por las ideas chavistas u otras corrientes similares, esa fue la causa de la caída electoral del candidato José María Villalta, atacado por sus ideas izquierdistas. Pero el Partido Acción Ciudadana (PAC, centroizquierda) de Solís gobierna en minoría con 13 diputados y ha necesitado acercarse a Frente Amplio.
