El jefe de gobierno de Buenos Aires, Mauricio Macri, ha anunciado que no se presentará como candidato a presidente, pero que buscará su reelección en la ciudad. Ante esta decisión, todo apunta a que si Cristina Fernández se presenta ganará las próximas elecciones, dado que su principal enemigo se baja de las presidenciales. No obstante, la mandataria, que sigue especulando sobre su posible reelección, no se deshace de los problemas que tiene dentro del kirchnerismo. Los líos con Hugo Moyano, líder sindical del país, no cesan. El jefe de gobierno de Buenos Aires, Mauricio Macri, ha anunciado que no se presentará como candidato a presidente, pero que buscará su reelección en la ciudad. Ante esta decisión, todo apunta a que si Cristina Fernández se presenta ganará las próximas elecciones, dado que su principal enemigo se baja de las presidenciales. No obstante, la mandataria, que sigue especulando sobre su posible reelección, no se deshace de los problemas que tiene dentro del kirchnerismo. Los líos con Hugo Moyano, líder sindical del país, no cesan.
A pesar de la renuncia de Macri a las presidenciales, el alcalde confirmó que mantiene firme su voluntad de buscar acuerdos con otras fuerzas de la oposición de cara a las presidenciales, a fin de sellar una alianza amplia para enfrentarse a la presidenta Cristina Fernández.
El líder del PRO insistió en que sin esos acuerdos en el arco no kirchnerista va a ser muy difícil construir una mejor sociedad y consideró que la unidad no debe ser sólo una palabra en los discursos, hay que sentirla y practicarla.
Tras el discurso de Macri, los kirchneristas no tardaron en pronunciarse. Una vez más, el encargado de las críticas fue el jefe de gabinete argentino Aníbal Fernández. El político dijo que Mauricio Macri no tiene nada que ofrecer a los argentinos y sugirió que lo que debe hacer es ponerse a trabajar pronto.
Por otro lado, la actual presidenta continúa con su programa político ajena a los problemas. Durante un acto, la presidenta, que ni confirma ni desmiente su posible reelección, dijo que su cuerpo no aguantaría el mandato diez años más, en respuesta a una militante que gritó que gobernara durante una década.
Las palabras de la mandataria desataron una serie de especulaciones enfocadas en que había contestado así ante los reclamos de reelección de los presentes. Horas más tarde, Aníbal Fernández, volvió a asegurar que la candidatura de Fernández es inevitable. Es la única persona capaz de cuidar los garbanzos de los argentinos, afirmó el político. Y agregó que sólo dos personas podían lograr eso en el país: Cristina y el fallecido Néstor Kirchner.
Sin embargo, si Cristina confirma algún día su reelección y es de nuevo presidenta, tendrá que lidiar los problemas surgidos desde dentro del propio kirchnerismo. El multitudinario acto en la avenida 9 de Julio, que organizó el líder sindical Hugo Moyano, se pareció más a una amenaza que a un apoyo. Fernández y Moyano siguen sin entenderse y es algo que salta a la vista de todos. No hay acto ni reunión que apacigüe las cosas entre ellos.
Al parecer, Cristina no tendría intenciones de modificar algunos de los reclamos de Moyano. No obstante, Moyano, secretario general de la CGT (confederación General de Trabajo) ha conseguido varios logros significativos en las últimas semanas. El sindicalista lo consiguió todo del gobierno en el marco de renovados conflictos salariales con pedidos de aumentos que exceden en varios puntos a las paritarias de camioneros y el anuncio de un paro nacional. Con el panorama incierto en el año electoral, Cristina intentó también calmar los ánimos del sector empresario, al que prometió cerrar las negociaciones pacíficamente y distribuir cargas en la nueva ley de ganancias.
