Entre los ejes centrales de este nuevo plan, Boric ha destacado el incremento del aporte familiar permanente, cuya cantidad se duplicará en 2023, pasando de 60.000 pesos chilenos (66,71 euros) a 120.000 pesos (133,45 euros) que irán directamente «al bolsillo de 1,4 millones de familias».
Además, el Gobierno aprobará una transferencia directa para la compra de alimentos que supondrá una cantidad de 13.500 pesos chilenos mensuales (15 euros) por hijo o por persona en situación de dependencia, durante un plazo de ocho meses.
DESCUENTOS EN MEDICAMENTOS Y AYUDAS A LA CONSTRUCCIÓN
El Gobierno de Chile también ha llegado a acuerdos con las farmacias para firmar distintos convenios mediante los que más de 6.900 medicamentos tendrán un descuento, lo que implica que más de 4.200 nuevos fármacos que reducirán su precio en hasta un 32%.
Por su parte, en lo que se refiere al empleo, se aprobará un fondo especial de 50.000 millones de pesos (55,6 millones de euros) para otorgar créditos al sector de la construcción con el objetivo de mantener el mercado laboral en uno de los sectores que ha tenido «más difícil» continuar con su actividad por el alza de los precios.
Asimismo, se ampliará el programa de alimentación escolar a 50.000 niños de colegios públicos del país para garantizar «más de una comida al día» en los hogares más vulnerables.
Con estas medidas, el presidente de Chile ha expresado su desdeo de recuperar el nivel de vida de las familias y garantizar su seguridad económica y social. «El primer semestre del año va a ser un momento difícil para las familias y como Gobierno tenemos que hacernos cargo de este desafío, con políticas públicas responsables», ha expresado Boric.
En este sentido, el presidente chileno confía en detener el alza inflacionaria y que se recuperen cifras de un dígito en los primeros meses del año. «Hay un ánimo de pesimismo pero Chile tiene gran potencial y vamos a salir adelante», ha concluido.