El dato de febrero supone un descenso considerable con respecto al observado en enero, cuando el IPC avanzó a un ritmo mensual del 1,2%. En lo que va de año, la inflación del país andino ha ascendido hasta un 1,5%, mientras que en la variación interanual el aumento de precios fue del 7,8%.
El INE ha explicado que diez de las doce divisiones que conforman la canasta del IPC aportaron incidencias positivas en la variación mensual del índice, frente a dos que arrojaron variaciones negativas.
En este sentido, destacaron los aumentos de precios en alimentos y bebidas no alcohólicas (1,8%) y la vivienda y los servicios básicos (0,9%). Entre las divisiones que registraron mayores contracciones en sus precios destacó recreación y cultura (-5,2%).
Por productos, el pan (3,2%), la carne de vacuno (2,8%), automóviles nuevos (1,7%) y la gasolina (1,9%) fueron los que registraron un mayor incremento en la serie. Por su parte, el paquete turístico (-24,3%) y los servicios de transporte aéreo (-17,5%) fueron los productos con un mayor descenso de precios observado.