Tal y como explica en un comunicado, las áreas de acción involucran la seguridad ciudadana, las relaciones con los consumidores en el turismo, el transporte turístico, la defensa civil, el cuidado de la salud y la comunicación positiva.
Entre las acciones previstas se encuentran el mapeo de comisarías de policía especializadas para ser presentadas de forma accesible a los turistas y la facilitación del registro de incidencias. Otro punto mencionado es la creación de mecanismos de alerta de desastres que se comuniquen con los turistas de manera fácil y rápida.
Además, el programa aborda la sensibilización de los agentes contra el uso de drogas y estupefacientes en las actividades turísticas y la implementación del Código de Conducta brasileño, para que los prestadores de servicios turísticos adopten una posición explícita de repudio a la explotación sexual contra niños y adolescentes.