Según datos del Indepaz, cuatro personas han sido asesinadas en un establecimiento público de Tumaco, en el suroeste del país, a manos de un grupo e hombres armados, que irrumpieron en el local y obligaron a los presentes a tirarse al suelo antes de disparar de forma indiscriminada.
En un comunicado, la entidad ha alertado de que se trata de la 72ª masacre registrada en lo que va de año y la segunda en menos de una semana. Las víctimas han sido identificadas como Jaison Steven Angulo Cabezas, José Francisco Mesa Guanga, Luis Carlos Sinisterra Torres y Heider Jackson Cortés Cortés.
La Defensoría del Pueblo había emitido una alerta temprana para el departamento de Nariño ante el aumento de la inseguridad y la violencia para la ciudadanía. En la zona operan el Bloque Occidental Alfonso Cano de la Segunda Marquetalia, así como las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) y grupos criminales como los Contadores.
El Indepaz ha indicado que en las 72 masacres perpetradas este año han muerto 258 personas. Los departamentos con mayor índice de violencia son Cauca (13 masacres y 43 muertos), Antioquia (diez masacres y 36 asesinados), Valle del Cauca (nueve masacres y 38 víctimas) y Nariño (siete masacres y 27 fallecidos).
CRISIS DE LOS PUEBLOS INDÍGENAS
La Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC) ha denunciado la crisis humanitaria que atraviesan los pueblos indígenas en Colombia ante el creciente número de asesinatos y el repunte de la estigmatización, las amenazas y los confinamientos en sus propios territorios.
Ante esta situación, la ONIC ha solicitado en un comunicado la protección de las comunidades indígenas en todo el país y ha alertado de que 43 líderes indígenas han sido asesinados durante 2021.
Los representantes de la organización han confirmado así que durante las últimas horas han sido asesinados seis indígenas en los departamentos de Nariño, Cauca y Chocó. Los datos muestran que una media de entre cuatro y cinco líderes indígenas son asesinados cada mes.
«Estamos viviendo un genocidio, una tragedia humanitaria para los pueblos ancestrales, especialmente para los 70 pueblos que se encuentran en vía de extinción física y cultural de los 115 existentes en nuestro país’, han asegurado.
La ONIC, junto a otras asociaciones, han exigido al Gobierno colombiano y a los grupos armados en los territorios, ya sean legales o ilegales, acabar de forma «inmediata» con lo que consideran un «etnocidio físico y cultural contra los pueblos y naciones indígenas». Así, ha advertido de que en Colombia «la guerra continúa» y está «desangrando las comunidades originarias por defender la vida, la paz y los derechos
La organización ha hecho entrega a la Justicia Especial para la Paz (JEP) y a la Comisión de la Verdad de un informe que detalla más de 3.000 homicidios en el marco del conflicto armado y denuncia la violencia ejercida contra estas comunidades desde la firma de los acuerdos de paz en 2016.