«Estas medidas han generado la caída de importaciones de alimentos en 83,7 por ciento, impidiendo la procura internacional de materia prima, productos terminados e insumo para la producción agrícola, así como sanciones a la mayoría de empresas internacionales y nacionales proveedoras de alimentos al país», expresó Leal Tellería en el foro virtual.
El ministro indicó que el Gobierno de Estados Unidos mantiene una persecución contra su país, para evitar que éste tenga acceso a los bienes esenciales.
«Existe una campaña de agresión sistemática contra el derecho a la alimentación del pueblo venezolano promovida por el Gobierno de los Estados Unidos y sus aliados aún en medio de la pandemia del covid-19, aplicando persecución, extorsión y bloqueo para evitar que Venezuela acceda a los recursos, bienes y servicios esenciales para atender las necesidades de su población», comentó.
Leal Tellería manifestó que las medidas coercitivas unilaterales causan daños indiscriminados a los derechos humanos, los cuales podrían ser calificados como crímenes de lesa humanidad.
«Solicitamos ante esta conferencia su intermediación para que cese el bloqueo económico y las sanciones unilaterales por considerarlas violatorias al derecho internacional y de todas las disposiciones que buscan limitar la utilización de los alimentos como instrumento de guerra, desestabilización y destrucción», expuso.
El funcionario señaló que a pesar de las medidas coercitivas el Gobierno venezolano ha impulsado programas alimentarios para incrementar la producción nacional.
El Gobierno aseguró que producto de las sanciones el ingreso nacional ha disminuido en un 99 por ciento.
En febrero de 2020, Venezuela elevó a la Corte Penal Internacional una denuncia contra Estados Unidos por la imposición de medidas coercitivas, al considerar que éstas constituyen crímenes de lesa humanidad y ataques generalizados a los ciudadanos de esa nación suramericana.
