El Grupo de Contacto Internacional (GCI) creado por la Unión Europea (UE) para abordar la situación en Venezuela ha pedido este martes a «las fuerzas democráticas de la oposición» que se unan para lograr «una exitosa transición a la democracia«, tras evidenciar en las pasadas parlamentarias sus desacuerdos estratégicos, con una parte optando por el boicot y otra participando con resultados muy pobres.
En una videoconferencia, en la que por primera vez han participado representantes de Chile y República Dominicana, el grupo diplomático ha hecho un llamamiento «a los actores políticos locales y a la sociedad civil» para que actúen «de buena fe», reanuden «con prontitud» las negociaciones y «establezcan con urgencia un diálogo inclusivo y un proceso de transición que conduzca a elecciones creíbles, inclusivas y transparentes».
El GCI, quien ya en diciembre emitió un comunicado desconociendo los resultados electorales del pasado 6 de diciembre –al que no se sumaron Bolivia y Argentina–, los ha vuelto a poner en duda en esta ocasión, exigiendo un nuevo Consejo Nacional Electoral (CNE) «independiente y equilibrado».
«Parte fundamental de ese proceso será la designación de un CNE independiente y equilibrado. Este será uno de los pasos necesarios para eliminar todos los obstáculos a la participación política», ha valorado.
El grupo ha exigido que se garanticen «todos los derechos políticos y civiles», además de «la libertad y la seguridad de todos los actores políticos», así como la puesta en libertad de «todos los presos políticos» y el fin de los «arrestos domiciliarios».
«La intimidación y las represalias continuas contra los actores políticos agravan aún más la crisis, creando más obstáculos para el retorno pacífico a la democracia y el Estado de Derecho», ha valorado.
A su vez, ha deslizado que el Gobierno de Venezuela estaría impidiendo la entrada de ayuda humanitaria y ha pedido que cualquier medida tomada en esa dirección «debe ser revertida», así como «la represión y los ataques contra las organizaciones de la sociedad civil, los defensores de los Derechos Humanos y los medios de comunicación debe cesar de inmediato».
«El GCI pide acceso pleno y sin trabas tanto para el personal humanitario como para los bienes con el fin de proporcionar de manera urgente el acceso a los alimentos, la gasolina, los medicamentos y los servicios básicos de salud, incluidas las vacunas contra la COVID-19», remarca.
«Más que nunca, Venezuela necesita el apoyo de una comunidad internacional que trabaje unida. El GCI expresa su continua voluntad de incrementar los contactos con socios regionales e internacionales para fomentar un entendimiento común y una respuesta a esta situación», concluye.
Hace una semana, la UE reiteró que la «única salida» a la crisis en Venezuela pasa por retomar las negociaciones políticas y establecer un proceso de transición que conduzca a unas elecciones creíbles, considerando además al líder opositor Juan Guaidó como un «interlocutor privilegiado».