A un día de cumplir dos años como presidente de México, Andrés Manuel López Obrador ha hecho balance de su mandato y ha reconocido que «no ha sido fácil», aludiendo concretamente a la pandemia de COVID-19, a la crisis económica derivada de la misma y a la oposición.
«No ha sido fácil, porque enfrentamos la pandemia, la crisis económica y también a los conservadores, que querían mantener el mismo régimen de corrupción, pero ya son otras las condiciones», ha dicho López Obrador, que ha agradecido a los mexicanos su apoyo.
En este sentido, el mandatario ha defendido la respuesta del Ejecutivo mexicano a la pandemia, que ha dejado más de 1,1 millones de contagiados y más de 105.000 muertos en el país latinoamericano.
«Procuramos que nadie se quedara sin atención médica, sin una cama, sin un respirador, sin un médico», ha sostenido López Obrador, que ha agregado que «no se permitió que sucediera lo que desgraciadamente pasó en países europeos, incluso en Nueva York».
Asimismo, ha acusado a los gobiernos anteriores de repartir el presupuesto como un «botín», destinado a mantener a la clase política y a los traficantes de influencias, al tiempo que ha denunciado que se «sobornaba» con dinero público, según informa el diario ‘El Universal’.
En este contexto, López Obrador ha asegurado que se está poniendo «orden en el caos». «Pero todo esto se está limpiando, se está enfrentando», ha zanjado el presidente mexicano.