La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) ha resaltado este viernes la necesidad de aumentar las tareas a nivel local para prevenir «estigmas, discriminación y violencia» contra los migrantes guatemaltecos que retornan a sus comunidades de origen en el marco de la pandemia de COVID-19.
«El mensaje más importante es que todos y todas corremos los mismos riesgos frente a la COVID-19, independientemente del estatus migratorio», ha señalado el jefe de la misión de la OIM para El Salvador, Guatemala y Honduras, Jorge Peraza.
Por ello, la agencia de la ONU ha lanzado una campaña que pretende luchar contra la discriminación de los migrantes retornados a Guatemala y para prevenir los estereotipos asociados a estos.
«Desde la OIM enfatizamos la democratización de las comunicaciones y el acceso a la información confiable y verificada que pueda tener un mejor impacto en la salud, el bienestar y el desarrollo de las poblaciones, especialmente de los grupos indígenas de Guatemala», ha explicado Peraza.
La iniciativa incluye mensajes sobre el virus, hallazgos sobre la enfermedad validados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y s medidas sanitarias básicas de protección para la salud y el bienestar, además de medidas de combate a la desinformación y de prevención del estigma y la discriminación.
La campaña se difundirá en medios locales de diecinueve municipios de los departamentos de Huehuetenango, San Marcos, Quetzaltenango, Totonicapán, Quiché, Sololá y Retalhuleu, en español y las lenguas mayas mam, kaqchikel y k’iche’. La información podrá llegar hasta las comunidades del sur de México.
Otros medios de comunicación previstos son la transmisión de los mensajes en altavoces instalados sobre vehículos y su divulgación a través de medios digitales y redes sociales institucionales, en este último caso con el objetivo de llegar a distintas audiencias.
De acuerdo con las cifras oficiales, en el año 2019 fueron retornadas a Guatemala de Estados Unidos y México 105.277 personas. Los cinco departamentos que recibieron el mayor número de retornados fueron: Huehuetenango, 16.352 personas; San Marcos, 16.197; Quiché, 8.593 migrantes; Quetzaltenango, 8.214; y Guatemala, 6.985.