El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ha promulgado la conocida popularmente como ley anticrimen, cuyo objetivo es combatir la violencia y la corrupción en el gigante suramericano. El Congreso aprobó el proyecto de ley a principios de mes, pero el documento definitivo no ha sido publicado en el Diario Oficial hasta el martes, según informa Agencia Brasil.
«El texto final que ha sido sancionado por el presidente trae progreso a la legislación contra el crimen», ha destacado el ministro de Justicia, Sergio Moro, en un comunicado difundido este miércoles.
La ley endurece las normas vigentes contra el crimen organizado, la delincuencia común y la corrupción, colmando así una de las principales promesas de Bolsonaro y su Gobierno.
Bolsonaro ha vetado algunos puntos de la versión original, entre ellos el aumento de la pena para los delitos cometidos en el ámbito de Internet, para la difusión de delitos en la Red y para los homicidios cometidos con armas de fuego de uso restringido, que afectan especialmente a las fuerzas de seguridad.