Dos de las tres grandes carreras ciclistas por etapas finalizaron con acento sudamericano en 2019. Egan Bernal pisó la tierra prometida colombiana al ganar el Tour de Francia y el ecuatoriano Richard Carapaz entró en la historia al inscribir su nombre en el palmarés del Giro de Italia.
Colombia, epicentro del ciclismo en Sudamérica, continuó explotando su talento con una larga lista de victorias firmadas por los numerosos miembros de su generación dorada.
De los ocho triunfos del velocista Álvaro Hodeg -colombiano con más victorias en 2019- a los cuatro de un esprinter asentado en la élite como Fernando Gaviria, pasando por las victorias finales de Miguel Ángel ‘Superman’ López en el Tour de Colombia o la Vuelta a Cataluña.
El país cafetero brilla en todos los terrenos. Y desde julio puede presumir de tener un ciclista en el palmarés de la madre de todas las carreras: el Tour de Francia.
Un prodigio llamado Egan Bernal, tercer ganador más joven de la historia a los 22 años, culminó la travesía que inició ‘Cochise’ Rodríguez, primer colombiano en participar en el Tour, en 1975.
A su hazaña se unieron las notables actuaciones de dos referentes en los últimos años y siempre candidatos a la victoria final: Rigoberto Urán fue séptimo y Nairo Quintana octavo, además de desquitarse levantando los brazos en una etapa en Los Alpes.
– Carapaz, la sorpresa –
El triunfo de Bernal, quizás antes de lo previsto, no es una sorpresa mayúscula. Ganador de la París-Niza y de la Vuelta a Suiza este año, tenía el perfil perfecto para convertirse en un hombre-Tour.
Muy distinta fue la victoria que logró Carapaz en el Giro de Italia, finalizado en junio. Es cierto que había vestido de rosa en 2018 y finalizó cuarto, pero nadie le incluía entre los principales candidatos este año.
Sin embargo, Carapaz aprovechó el marcaje mutuo de Primoz Roglic y Vincenzo Nibali para enfundarse la ‘maglia’ de líder en la 14ª etapa y luego demostró un estado de forma muy superior al de sus oponentes para conservarlo.
La ‘Locomotora de Carchi’, de 26 años, coronó de esta forma una meteórica ascensión desde que saltara a Europa en 2017 captado por el equipo Movistar. Es el primer sudamericano, no colombiano, en ganar una gran vuelta.
Pero Carapaz le debe mucho al país cafetero. Tras nacer a unos metros de la frontera, fue en Colombia donde se formó como ciclista y logró sus primeros éxitos.
– Ineos, la ‘casa’ del talento latino –
Bernal es el último producto de la ‘factoría Sky’, convertida en Ineos esta temporada, que se ha hecho con siete de los últimos ocho Tours, con cuatro ciclistas diferentes (Chris Froome en cuatro ediciones, Bradley Wiggins, Geraint Thomas y Bernal en una).
El equipo británico ha encontrado en Sudamérica el talento para reemplazar a sus pioneros locales -Wiggins está retirado, Froome tiene 34 años y Thomas 33-.
«Sabíamos que teníamos un grupo de chicos viejos que eran buenos y buscamos de manera profunda en la nueva generación. Decidimos que sería Egan. Luchamos duro por tenerlo y se ha desarrollado de manera fantástica», explico Dave Brailsford, director del equipo, sobre su gran apuesta.
Y Carapaz abandonará el Movistar para formar parte de la escuadra más potente del pelotón en 2020. «Es muy fuerte, con mucha calidad. Un escalador que tiene bastante potencia. Es bastante explosivo, así que yo creo que era un corredor que le faltaba a este equipo», definió Bernal a su nuevo compañero.
El equipo cuenta además en sus filas con otros dos latinoamericanos precoces: el colombiano Iván Sosa, de 21 años, y el ecuatoriano Jhonatan Narváez, de 22.
Y para el próximo curso acaba de anunciar el fichaje de Brandon Rivera, un colombiano de 23 años.
«Egan y yo somos muy buenos amigos. Nos conocemos desde que teníamos 10 años, cuando empezamos en bicicleta de montaña en Zipaquirá. Los dos estábamos llenos de sueños, así que correr juntos otra vez es increíble», señaló.
Parece que el éxito del Ineos en los próximos años seguirá teniendo un irresistible acento sudamericano.